Cada vez que comienza un nuevo año, millones de personas de todos los rincones del mundo se proponen cambiar algo en su vida o en los hábitos de está.
También estamos padeciendo otras desgracias como lo absurdo de la guerra de Ucrania y lo que esta se está llevando de nosotros, no solo en el aspecto humano también en lo económico, moral o sentimental.
En estas fechas, aunque somos consciente que en nuestro querido mundo hay otras situaciones de las que acordarse, con alegrías y tristezas. Hoy nuestro primer pensamiento de este año se dirige hacia estas desagradables situaciones que estamos viviendo y soportando. También para el éxodo que están sufriendo muchos emigrantes, que en riesgo de sus vidas escapan como pueden, dejando atrás sus países, raices, gentes y toda su vida ( aquí en Canarias nos toca vivir en directo, de vez en cuando, el éxodo de las pateras) , huyendo de la miseria y la precariedad y lo más triste, de las injusticias que les someten sus gobernantes dictatoriales, aunque algunos de los ciudadanos o gobiernos de los países a los que en riego de sus vidas logran llegar, tratan de hacerles aún la vida más difícil.
También y como en unas personas tan implicadas como nosotros por ciertas causas, no podía ser de otra forma. Nuestro pensamiento y deseo para que el desarrollo del autocaravanismo en nuestro país y en Europa, con sus avances y retrocesos, continúe su progreso de mejora. Sobre todo en el aspecto asociativo y de unión en pos de un proyecto nacional o europeo y no solo del terruño, que en mi opinion, es de lo que hoy adolecemos y nos hace falta para nuestros retos de futuro.
Para todos ellos, nuestro sincero pensamiento en esta noche.
Sea como sea, los humanos estamos programados para afrontar y tratar de superar estas cosas, si no, como especie y sociedad, no hubiésemos llegado hasta aquí.
Suena la última campanada y casi atragantados con las uvas, se suceden las felicitaciones y los besos a la familia o los mensajes a los móviles de los amigos o conocidos, pero la gran mayoría dedicamos unos minutos para pensar cómo será el año que nos espera y lo que dejamos atras.
Atrás se quedan los buenos y malos momentos, los excesos o los malos hábitos y nuestras reflexiones nos llevan a hacer votos para comenzar un nuevo período repleto de buenos propósitos. Unos quieren dejar de fumar, otros "bajar de peso" ahorrar dinero, hacer algún viaje soñado o sencillamente disponer de la necesaria salud y economía para seguir llevando la vida adelante de la mejor forma posible.
Estos, junto con otros, quizás sean algunos de los pensamientos y las promesas o deseos que los españoles y otros ciudadanos de este mundo, tenemos en los primeros minutos del nuevo año.
Aunque, lamentablemente, por experiencias anteriores, muchos somos conscientes de que una gran parte de las metas marcadas para los próximos 12 meses se diluyen a los pocos días, incluso algunas, como la de la dieta, no llega ni a Reyes jejeje.
No somos sólo los españoles quienes nos marcamos objetivos, sino todo el mundo. Quizás esta curiosa forma de deseos se deba a que en la humanidad funcionamos por ciclos y queremos siempre establecer las cosas por períodos.
El no conseguir algunos o todos estos deseos, quizás se deba a las prisas del mundo en el que vivimos, parece que todo lo queremos para ayer y eso evidentemente no es posible, las cosas al igual que los deseos necesitan de madurez y del tiempo necesario para que estas no solo se vayan asomando, también para implementarse y consolidarse y eso nos señala que la mayoría de ellas no pueden ser para ayer como nosotros queremos o deseamos.
Senia y yo, en nuestra particular forma de ver la vida, nuestro mayor deseo, siempre que afrontamos el reto de un nuevo año es que la sociedad en general disponga de paz, trabajo y salud, esto es lo más importante para nosotros y también se lo deseamos al resto de los pobladores de este mundo.
¡¡¡Feliz año 2.023!!!.
Pedro y Senia.
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