Cosas del autocaravanismo.: Ruta de senderismo entre El Palmar de Buenavista y Santiago del Teide.

Con nuestro regreso a la isla de Tenerife, el pasado dia 10 de noviembre de 2012, de nuevo participe en la 23 ruta de senderismo del año 2012, organizada por El Patronato de Cultura del Ayuntamiento de Arona.

La ruta se desarrolló por el noroeste de la isla, entre las poblaciones de Buenavista del Norte y Santiago del Teide, recorriendo unas de las zonas más antiguas de la isla, situadas en el Parque Rural de Teno Alto.

La ruta aunque bastante exigente, casi 8 horas por senderos con un perfil de un 80% ascendente, es muy atractiva y de gran interés, destacando el impresionante paisaje tinerfeño de esta parte de la isla salpicado de casas tradicionales y bancales de piedra, acompañado por poblados bosques de laurisilva, con la existencia de una gran variedad de ambientes que facilita la aparición de multitud de especies vegetales, las formaciones y erosiones volcánicas con profundos barrancos, recorriendo parajes como Teno Alto, Baracan, Mirador de la Tabaiba, Cruz de Gala etc.

A las 8 de la mañana, como es habitual, nos reunimos los participantes frente al edificio del Centro Cultural de Los Cristianos (Arona), donde después del saludo, en mi caso el reencuentro con algunas personas, compañeros de senderos anteriores a los que hacía tiempo que no veía, nos trasladamos en la guagua hasta Santiago del Teide, donde realizamos una paradita para disfrutar de un café en la agradable compañía de los participantes, unos 18, la mayoría canarios menos una compañera de nacionalidad italiana y el que suscribe.

Me extrañó no ver en el grupo la presencia del Guía Nicolás, que al parecer no asistió por problemas en una rodilla, aunque como le comenté al otro responsable de la ruta, José Pedro, yo creo que se rajó, ya que la edad no perdona y 22 rutas realizadas en un año por parajes con una orografía tan escarpada como la tinerfeña, aparte de algunas correrías con la cámara a cuestas detrás de algunas que otras escurridizas aves, a ciertas edades pasan factura.

Bromas aparte....Después del café, continuamos ruta con el autobús por la complicada carretera de acceso Masca, que tras el sorteo por parte del "guagüero" de curvas y mas curvas,a las 09,45 horas llegamos un poco mareados del movido traslado a El Palmar de Buena Vista, desde donde partía la ruta a pie.

Desde el inicio tuvimos que salvar una corta, pero dura pendiente que discurría por una de las antiguas vías de comunicación de la isla, antes de hacer las actuales carreteras, un antiguo camino empedrado que nos llevó al caserío de Alto Teno, donde en la tienda / venta de la aldea, recuperamos un poco de fuerza saboreando un platillo de queso blanco de cabra que estaba exquisito.

Después del pequeño descanso, continuamos ruta dejando la aldea atrás, con el gusto en el paladar del buen queso de cabra, el cual si os acercáis por allí os recomiendo no os lo perdáis. El sendero continuaba en ascenso, observando la humedad de la tierra tras las últimas y largo tiempo esperadas lluvias, con la presencia de distintas plantas y algunas setas, que tras el letargo de la larga sequía comenzaban a despertar con fuerza. El sendero conforme íbamos ganando altura, también nos ofrecía unas extraordinarias vistas hacia un lado y el otro del cordal por donde trascurría la ruta.

En la zona de Baracan, desde donde se divisa una gran extensión de la parte oeste y norte de la isla, con grandes erosiones volcánicas que con el paso del tiempo se ha convertido en profundos barrancos como el ya famoso de Masca, que descienden hasta el mar. Como viene siendo habitual en este tipo de senderos, en este privilegiado y panorámico enclave, nos detuvimos y reagrupamos para disfrutar de un paisaje grandioso, en donde el guía José Pedro Martín, acompañado por alguna información didácticas con algunas fotos y esquemas, nos hizo participes de sus conocimientos de la zona, explicando entre otras cosas, la formación volcánica y geológica de la zona del parque de Teno Alto y el asentamiento humano con sus terrazas de cultivo. Geológicamente es una de las zonas más antiguas de la Isla, con una edad aproximada de unos 7 millones de años, hecho que queda patente al observar su abrupta y erosionada morfología.

Continuamos ruta descendiendo hasta el mirador de La Tabaiba, para continuar por una prologando pendiente que discurre entre bosques de laurisilva de la época terciaria, ganado siempre altura, desde donde al fondo se divisaba la pintoresca población y el barranco de Masca. Alrededor de las 3 de la tarde por fin vimos aparecer una antigua era que el guía José Pedro nos había anunciado, pero que en algún momento pensé que era broma y ésta no llegaba nunca. En la era resguardados por unos matorrales del viento cargado de niebla húmeda y fría del alisios, con alguna fatiga algunos, conseguimos llevarnos un bocado de nuestra mochila a la boca y tratar con ello de reponer algo nuestras ya mermadas fuerzas para afrontar la continuación del último tramo de ascenso de la ruta, hasta el paraje La Cruz de Gala, desde donde ya se divisaba Santiago del Teide.

Antes de llegar a La Cruz de Gala, tengo que comentar que algunos fruto de la falta de preparación para afrontar rutas tan exigentes, sufrimos más de la cuenta tratando de superar el empinado y prolongado sendero, aunque al final a base de esfuerzo lo superamos y esto tiene su premio en forma de satisfacción por lograr superar la ruta.

Alrededor de las 5,30 de la tarde tras superar un descenso de una media hora llegábamos a Santiago del Teide, donde nos estaba esperando el autobús para regresarnos a el punto de partida de la mañana, aunque algunos más preparados físicamente habían llegado media hora primero y nos estaban esperando en el bar dando buena cuenta de unas cervezas.